Capítulo Dieciséis: WTF!!??

Aquella mañana, cuando Manuel se fue a su casa (osea, cuando Manuel cruzó el descansillo y entró en su casa, mejor dicho) yo me quedé durante media hora en la cama dándole vueltas a la cabeza.

Recapitulé todo lo que había pasado últimamente y me di cuenta de que lo mío daba para el arco argumental completo de una temporada de Queer As Folk. Hace unos meses conocía HoneyB (para los amigos, B) un chico muy majo que me tiró los trastos vía Grindr y que se convirtió en un follamigo recurrente del que me estaba empezando a pillar. Pero cuidado, que no es que me estuviera enamorando; simplemente comenzaba a sentir esas ganas inexplicables de pasar tiempo a su lado para ver si realmente hay algo o no.

Cuando yo empezaba a sentir que sí, que había algo, B empezó a salir con La Peligros; probablemente la peor persona a la que robarle un novio. Porque si Iván (su nombre real) ya es peligroso de por si, imagínate si proyecta todo su odio hacia la misma persona.

Y mientras yo trataba de quedar con B para ver si lo suyo con La Peligros iba en serio y tratar de averiguar si todo lo que yo estaba sintiendo eran cosas mías o era cosa de los dos voy y me acuesto con uno de mis nuevos vecinos: los gemelos Paco y Manolo. O Fran y Manuel.
Y lo peor es que voy y me acuesto con el que menos pinta de gay tenía, lo cual ya me hacía presagiar que aquello no me iba a traer nada bueno.

Y efectivamente, nada bueno trajo.
Pero no adelantemos acontecimientos.

Tras darle vueltas y vueltas a la cabeza sobre todo lo que me estaba pasando conseguí quedarme dormido. Era sábado. Recibí un par de llamadas de Hugo y de Raúl que, imagino, querían preguntarme si iba a ir a la playa con ellos y, de paso, sonsacarme todo lo que pudieran sobre Manuel. Antes de darme la vuelta y seguir durmiendo llegué a la conclusión de que era mejor no contarles nada de lo que había pasado aquella noche, porque estas dos son muy escandalosas y seguro que me traían problemas.

Y me los trajeron.
Pero de verdad, no adelantemos acontecimientos.

Así que seguí durmiendo. Cerré los ojos y descansé. Para cuando desperté ya eran casi las cinco de la tarde y al ver el reloj me sentí como una mierda, como un parásito que había desaprovechado un buen día. Luego recordé que, técnicamente, el día había empezado a las 00:00 de la noche anterior y desde esa hora hasta ese momento exacto había aprovechado muy bien el tiempo.

Me quedé un momento estirado en la cama, sonriente. Cogí el iPhone y gracias a esa maravilla que es el Remote y el dejar el ordenador encendido las 24 horas hice que comenzara a sonar en mi iTunes una lista de reproducción que me hice un día llena de rock alternativo para momentos de subidón. Y empezó a sonar un grupo finlandés bastante poco conocido (y que ojalá siga así).

Abrí el Grindr. Por curiosidad. Porque en realidad no quiero nada con nadie de los que hay ahí. Bueno, con uno sí, pero desde que está con La Peligros ya no se conecta así que… Hasta esa mañana.
B se había conectado a eso de las 11 y me había dejado 10 mensajes.

“Sé q llevas tiempo qriendo qdar conmigo. Lo siento si parece q te rehuyo”
“Xo ya sabes cmo es Ivan”
“Si kieres podemos vernos esta tarde”
“Xq yo si q kiero”
“Bueno, en realidad es q necesito verte”
“Te lo iba a contar cuando te vea xo bueno, he dejado a Iván”
“No se, le he cogido mucho cariño xo no es lo q speraba”
“Y admas dsd la ultima vez q t vi no paro de pnsar en ti”
“Q xorrada, en vez de hablart x aki deberia llamarte, a lo mejor no lo lees nunca”
“Xo siempre me ha gustado escribirte x aki ;)”


Mi cara al terminar de leerlos era un poema. Pero uno de esos que no se entienden, de esos que parece que no se hayan escrito sino que alguien haya hecho un sorteo al azar de palabras y tal y como han salido del bombo las ha ido colocando y más tarde las ha publicado en un libro de portada marrón con una ilustración de un artista conceptual (que tampoco tiene ni puta idea de qué ha pintado) diciendo que todo es un compendio de poemas que hablan de la tristeza y la melancolía.
“Siento color de mieles en mis labios del dolor hiriente” o algo así.

Ayer por la noche le contaba a mis amigos lo mucho que me gusta B. Luego me lo encuentro con su novio, La Peligros, y me siento fatal. Y entonces, dando por hecho que lo mío con él era imposible, me acuesto con mi vecino. Y ahora resulta que poco después de encontrarme con B y con Iván; B dejó a Iván. Por mí. O eso me parecía entender. “…no paro de pensar en ti”
B no puede enterarse de que me acosté con Manu.

Mientras miraba la pantalla del iPhone intentando aclarar mis ideas, el circulito verde apareció bajo su foto: se acababa de conectar. Y no tardó ni un segundo en escribirme.

“Hola”
“Hola”
“Leiste lo q te puse?”
“Si”
“Perdona si me he pasado”
“Tranquilo”
“Pues… ¿qdamos?”
“Podemos tomar un café y charlar”
“O no…”
“Pasa algo?”
“No, no, perdona”
“Es q me acabo de levantar y estoy un pko empanado”
“Jajajajaja”
“Mucha juerga anoche?”
“+ o –“
“Hoy he visto a Raúl y Hugo en la playa”
“Me han dicho que no te fuiste solo a casa”
“;)”
“¿Estaba tan bueno como m han dixo?”

“Como para pedirles q me guarden un secreto”
“Jajajajajaja”
“Jajajajaja”
“Xo ¿lo estaba?”
“Sí”
“Q morbo.”
“Ya m lo presentarás”


WTF? ¿Ya me lo presentarás? ¿Pero no se supone que quiere quedar conmigo esta tarde para decirme que le gusto?

“Mmmm…”
“Q?”
“Voy a ducharme”
“Ok”
“Te veré luego?”
“No lo sé”
“Seguro q no te pasa nada?”
“No, no”
“Bueno, estoy un poco confuso”
“X?”
“Pues… no sé. Da igual.”
“Ok. Xo sabs q puedes confiar en mi y contarmelo”
“X aki será un follón. ¿A las 7 en Universitat?”
“Mejor a las 6. He qdado a las 7 y media”
“Bueno, voy un poco justo, intentaré llegar”
“Si no te va bien podmos qdar otro dia”
“Es q he conocido a un turco x aki q esta muy bueno y se va mañana de BCN”

WTF???????????

“X eso, q si kieres qdamos mañana mejor”
“Sí, mejor”
“Ok ;)”

Y se desconectó.

¿Sabes eso que te he dicho sobre el poema, y mi cara, y la falta de sentido de los sorteos de palabras? Pues en ese momento mi cara no era un poema.
Era una puta enciclopedia Larousse llena de palabras sorteadas.

Y SIN UNA PUTA ILUSTRACIÓN.

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